El planeamiento tributario tiene como finalidad 2 objetivos para la empresa: reducir la carga fiscal y gozar de beneficios tributarios. Un planeamiento tributario ayudará a tu empresa a evitar errores en:
- Pago en exceso de pago impuestos, multas innecesarias
- Pago por embargos de cuenta
- Desconocimiento y reparos de gastos
- Realizar delitos tributarios para minorar la carga fiscal.
- Errores en el cálculo de la devolución del Impuesto a la Renta
Las empresas que pudieran errar en el cálculo del coeficiente para determinar el pago del IR, tampoco tendrían la obligación del pago de intereses. Y tienen derecho a pedir una devolución por parte del fisco por los años no prescritos, esto es desde el 2012. Los gastos para deducirlos de sus rentas de tercera categoría deben ser aquellos necesarios para producir y mantener la fuente productora de la renta y serán los normales para la actividad que cada empresa desarrolla y además sus gastos deben cumplir con los otros criterios de razonabilidad y generalidad con las excepciones del caso.
La ley de renta establece algunos gastos sujetos a límite, como los gastos de representación, los gastos recreativos, las dietas de directorio, gastos de movilidad, los gastos que provengan de contribuyentes del Nuevo RUS, etc. La ley del Impuesto a la Renta no permite deducir entre otros: los gastos personales y ajenos al negocio, las multas e intereses moratorios, los pagos efectuados fuera del sistema bancario (por importes mayores a S/3,500 o US$ 1,000), los gastos que no están sustentados con comprobantes de pago, los gastos que se sustenten con comprobantes provenientes de contribuyentes no habidos o notificados por la SUNAT con baja del RUC.