PERSPECTIVAS DESDE LA MEDICINA OCUPACIONAL DE ALTO RIESGO
La seguridad y la salud en el trabajo han evolucionado considerablemente en las últimas décadas, impulsadas por avances tecnológicos, cambios en la naturaleza de las ocupaciones y una creciente conciencia de la importancia de la prevención de riesgos laborales, entre otros. La medicina ocupacional, en particular la enfocada en entornos de alto riesgo, desempeña un papel fundamental en la promoción de una cultura preventiva en el lugar de trabajo; así como el empleador asume un papel de garante de estas. Este artículo se sumerge en los principales desafíos más recientes que enfrentan los profesionales de la medicina ocupacional en su búsqueda constante de garantizar la seguridad y la salud de los trabajadores.
- Cambios en la naturaleza del trabajo
El mundo laboral ha experimentado transformaciones notables. La automatización y la robótica han cambiado la forma en que se realizan muchas tareas, lo que ha dado lugar a nuevos riesgos y demandas en materia de seguridad. La medicina ocupacional debe adaptarse para evaluar y mitigar estos riesgos emergentes, y al mismo tiempo, garantizar que los trabajadores tengan las habilidades necesarias para interactuar de manera segura con la tecnología. Las constantes capacitaciones para el uso de la tecnología como de la medicina moderna son fundamentales.
- Diversidad en el lugar de trabajo
Los lugares de trabajo son cada vez más diversos en términos de género, edad, cultura y habilidades. Esto plantea desafíos en la adaptación de medidas de seguridad y salud para satisfacer las necesidades específicas de grupos diversos. Los profesionales de la medicina ocupacional deben ser sensibles a estas diferencias y trabajar en la implementación de prácticas inclusivas que aborden las necesidades de todos los empleados; es por ello, que tanto el gerente médico ocupacional con el ingeniero ocupacional y medio ambiente tienen que trabajar de la mano, para que los resultados se vean en corto plazo. Esto se logra trabajando ambas áreas en coordinación y de manera integral. Cuando la medicina está por un lado y la ingeniería por otro los perjudicados somos todos, porque no hay una congruencia en las acciones a tomar para bien de las empresas de alto riesgo.
- Salud mental en el trabajo
La salud mental en el trabajo es un tema que ha ganado una atención significativa. El estrés laboral, la ansiedad y la depresión pueden afectar la seguridad y la productividad de los trabajadores. La medicina ocupacional de alto riesgo debe desarrollar estrategias para evaluar y gestionar los riesgos psicosociales en el lugar de trabajo y promover el bienestar emocional de los empleados. Esto con los años ha empezado a tomar mucha importancia ya que la mayoría de los trabajos de alto riesgo ameritan un esfuerzo mayor físico y mental para poder laborar. No basta con evaluaciones de las clínicas ocupacionales 1 vez al año. El personal de salud liderado por su gerente médico debe estar en constante prevención e implementar dinámicas que ayuden a la salud mental del trabajador.
- Tecnología y datos en la prevención
Las innovaciones tecnológicas, como el Big Data, la Inteligencia Artificial, nuevas Plataformas de Atención, etc. están revolucionando la prevención de riesgos laborales. La medicina ocupacional debe abrazar estas tecnologías para anticipar y gestionar riesgos, así como recopilar y analizar datos en tiempo real para tomar decisiones informadas. Es importante que el ingeniero de SSOMA como el gerente médico estén involucrados con las nuevas tendencias y haciendo uso de ellas llegar a tener accidentes mínimos o incluso llegar a tener accidentes 0.
- Nuevas normativas y regulaciones
Las leyes y regulaciones en materia de seguridad laboral evolucionan constantemente. Los profesionales de la medicina ocupacional deben mantenerse actualizados y adaptar sus enfoques para cumplir con las nuevas normativas. Esto garantiza -entre otros- que los lugares de trabajo cumplan con los estándares de seguridad más actuales y efectivos. Las actualizaciones se dan por rubros, es por ello por lo que las auditorias médicas ocupacionales son constates a nivel de alto riesgo.
- Participación de los trabajadores
La participación activa de los trabajadores en la promoción de una cultura preventiva es esencial. Los trabajadores deben sentirse empoderados para comunicar preocupaciones, proponer mejoras y colaborar con los empleadores en la identificación y mitigación de riesgos. La medicina ocupacional debe fomentar la colaboración y el diálogo continuo entre todas las partes involucradas.
- Educación y formación continua
La educación y la formación constante son fundamentales para mantener una cultura preventiva sólida. Los profesionales de la medicina ocupacional tienen la responsabilidad de capacitar a trabajadores y empleadores en prácticas seguras y saludables, y de fomentar un compromiso continuo con la seguridad en el trabajo. No se hace prevención pensando que cumpliendo la normal de asistir una (1) vez al año a una clínica ocupacional es suficiente y menos cuando hablamos de trabajos de alto riesgo. La educación continua, el trabajo multidisciplinario es fundamental para llegar a estándares altos.
La medicina ocupacional de alto riesgo se enfrenta a una serie de desafíos en la promoción de una cultura preventiva en seguridad y salud en el trabajo. La adaptabilidad y la innovación son esenciales para abordar estos desafíos emergentes y garantizar un entorno laboral seguro y saludable en un mundo en constante cambio. Al enfrentar estos desafíos con determinación y enfoque, la medicina ocupacional seguirá desempeñando un papel vital en la protección de los trabajadores y la prevención de riesgos laborales en el futuro.